El Senado de la Nación dejó caer el proyecto de ley de reforma electoral que fuera aprobado por amplia mayoría en la Cámara de Diputados. Fueron los senadores del Frente Para la Victoria los responsables de la caída de este proyecto, indudablemente tienen muy en claro que saliendo del viejo sistema que tenemos se les hará muy problemático sostener el poder que supieron construir en base a sus”aparatos electorales”, usualmente construidos y sostenidos desde el presupuesto y las estructuras de gobierno que han alcanzado.
Pero también es cierto que desde el mismo campo de la informática se han presentado muchas objeciones al sistema propuesto. Objeciones que han probado que mediante una aplicación a teléfonos móviles se puede haquear el voto permitiendo hacer una versión informática de la muy vieja práctica fraudulenta y clientelista de la “cadena”. Ya que el chip que se incorpora al voto impreso puede ser leído a través de esa aplicación y verificar a quién se votó.
Días atrás los especialistas que vienen denunciando esta posibilidad hicieron una demostración categórica ante un grupo de senadores nacionales de FPV.
Lo peor de todo es que lo que se viene diciendo desde hace años en cuanto a esta probada falla del sistema propuesto nunca ha tenido una refutación clara y categórica, antes bien, el silencio ha sido hasta ahora la única respuesta.
El sistema de votación que preveía esta ley ahora sin futuro, fue ensayado en Salta y en las ciudades de Buenos Aires y San Luis. Se comprobó la notable mejora en la rapidez y sencillez para votar y para contar los votos, en un menor gasto para todo el sistema y en un claro beneficio para los partidos más “chicos”. Pero no se ha conocido una respuesta que específica a la crítica señalada. Mientras no se refute o resuelva esta falla de seguridad, cabe decir que la decisión de estos senadores es correcta, aun cuando beneficia las corruptas prácticas electorales vigentes.
Resulta entre curioso y sospechoso que esta falla señalada no haya sido respondida, el silencio no es un buen remedio a algo muy claro, concreto y hasta probado como ya dije, ante varios senadores nacionales. Responder en un tema así significa una mínima demostración de seriedad y responsabilidad en una cuestión fundamental para nuestra república democrática.
Otra forma.
Por cierto que no se puede dejar de reconocer la imperiosa necesidad de simplificar y transparentar el sistema de votación argentino actual.
Mientras se resuelven estas fallas no es bueno abandonar la idea de introducir una forma más eficaz, eficiente y honesta para votar.
Creo que debiera analizarse el sistema por el que se supo votar años atrás (desconozco si aún se hace así) en la provincia de Santa fe.
Se trata de tener boletas únicas (con todos los candidatos de todos los partidos) separadas por cargos nacionales, provinciales y municipales. Cada una de esas categorías identificada por un color distinto en la boleta y que debían introducirse en urnas separadas e identificadas con el mismo color de las boletas.
Un sistema como éste permite la simultaneidad de elecciones respetando la autonomía federal de provincias y municipios, aminorar gastos, etc.; supe referirme a esta forma en:
//www.tochimoreno.com.ar/nuestro-sistema-electoral/#more-1254
Años antes, en 2003 escribí esta otra nota
//www.tochimoreno.com.ar/urnas-separadas/#more-227
Se me ocurre pensar que este sistema es un buen paso intermedio hasta tanto se resuelven los problemas que en este momento presentan tanto el voto electrónico (prohibido en varios países), como la boleta electrónica frenada ahora en el Senado de la Nación.
Si se cayó esta reforma propuesta por el gobierno nacional, que no se abandone la idea base, ni se imponga el silencio ante el señalamiento de los problemas que se van detectando.
SAN LUIS. Noviembre 25 de 2016
Cuando un sistema determinado es factible de ser distorsionado por «corruptos», lo único que queda es que quienes lo controlan tengan capacidad para hacerlo. En el caso electoral, la INMENSA MAYORÍA de los electores no está en condiciones de controlar cuando es electrónico, esto solo lo pueden hacer «expertos». Por ello, a pesar de sus ENORMES DIFICULTADES me quedo con el viejo de las boletas. Al menos en mi mesa de votación puedo ejercer control, aunque igual me metan el perro en otras.
Hola Mario, gracias por comentar. Hay que diferenciar el más peligroso de todos es el voto electrónico, el que no se imprime, se guarda en la PC y hace el escrutinio con sólo dar una orden. Ese es el prohibido en Alemania, con las razones (entre otras) que vos das acerca de la fiscalización. Está la boleta electrónica, que imprime lo que vos elegís, pero le agrega un chip que es justamente lo que puede haquearse. Es el sistema de Salta, ciudad de BsAs y ciudad de San Luis y el que propone el gobierno nacional. Me calienta que quienes lo proponen no den respuestas a esta falla de seguridad que finalmente se mostró la semana pasada en el Senado. Lo que propongo, copiando a Santa fe es un boleta única por cada jurisdicción (nacional, provincial y municipal) Algunos santafesinos consultados me dicen que es bueno, pro siempre hay que bucear más a fondo. Abrazón