Una crítica a la política, desde la política.
Este año en la mayoría de las provincias habrá dos elecciones: una nacional y otra provincial. En nuestra ciudad de San Luis, habrá una más en virtud a la reciente convocatoria municipal para el 29 de julio. Seguramente en la Villa de Merlo se hará lo mismo en breve.
Con esta convocatoria el Intendente capitalino Vergés se juega una carta brava. Pensando en lo que más le conviene a su eventual candidatura. No está muy claro hasta dónde llega esta a conveniencia.
Lo que sí está claro es que esta forma de convocatorias múltiples no surge precisamente a favor del conjunto del pueblo. Pero ya habrá una segunda nota sobre este tema. Tengamos en cuenta que con tantas elecciones, tenemos no menos de 6 meses de campañas. Un período demasiado largo como para que no canse, para que no se diluyan los mensajes e ideas.
La primera objeción que surge es la económica. Las tres elecciones ocasionan gastos que se repiten por tres y todo sale de los presupuestos que deben procurar atender las necesidades del pueblo. Es probable que lleguen a escasear fondos para alguna urgencia; pero nunca para hacer las elecciones según le convenga a quien maneje ese presupuesto.
¿Otra objeción o duda? Hay que decirla aunque moleste. Es el tema de padrones.
El decreto de convocatoria nada dice acerca de la exhibición de padrones provisorios, períodos de tachas e inclusiones y entrega de padrones definitivos. No hay legislación municipal sobre la cuestión, por lo que lo más cercano es la legislación provincial. Y ésta dice que los padrones provisorios deben estar listos 120 días antes de la elección. ¡Y eso es ahora. Ya!
La responsabilidad de los padrones la tiene la justicia electoral federal. Y ésta ajusta su calendario a la convocatoria nacional. ¿ Cómo hará la Intendencia Municipal de San Luis para conseguir estos padrones habiendo decidido esta convocatoria en forma tan imprevista? No es objetivo fácil de lograr. Y en San Luis, menos.
Cabe precisar que la convocatoria provincial para el 19 de agosto tampoco dice nada sobre padrones, pero tiene más tiempo y camino más fácil para solucionar el tema ante la Justicia Federal. Sin padrones y todo lo que se desprende de ellos, no es posible hacer ninguna elección.
¿Se buscará una gestión directa del gobierno nacional para poder contar con ellos? Eso sería casi una intromisión de un poder sobre el otro.
Una dificultad más surge de la no-solución de los problemas legales, de seguridad y de espacio que se vivieron en la pasada elección municipal de noviembre del 2003 y que seguramente volverán a estar presentes. Y nadie quiere una nueva elección cuestionada.
En suma, que quedan muchos cabos sueltos en esta convocatoria, que parece tener mucho de improvisada y voluntariosa.
Ojalá me equivoque, pero a la vista de lo que hay, parece que no. ¿Habrá alguna sorpresa tan grande como esta convocatoria?
Todos queremos las cosas claras y que no se actúe del mismo modo que lo hace el gobierno provincial.
Mañana habrá una segunda parte.