Estamos lejos aún de conocer las verdaderas causas de los incendios que asolaron nuestra provincia. También de poder evaluar la magnitud de los daños. Quizás nunca podamos conocer toda la verdad. Porque no es posible poner números justos al esfuerzo humano, a los sueños quemados, a las esperanzas postergadas.
Pero sí se pueden poner en práctica algunas acciones urgentes para dar una solución imprescindible a las bases de la necesaria reconstrucción, la de los elementos mínimos de trabajo para que nuestros hermanos afectados por esta sucesión de siniestros puedan volver a sentirse dueños de sus destinos. Porque lo que más valoramos todos es lo que podemos hacer con nuestras manos, con nuestro esfuerzo.
Gran parte de la dimensión de este desastre es responsabilidad del Estado Provincial, porque sus instituciones no supieron poner en práctica ni las medidas preventivas, ni organizar o proveer para las correctivas. Por lo tanto es el Estado Provincial quien debe de inmediato comenzar a dar no las soluciones parches, sino las de fondo para que los afectados comiencen a recomponer su vida de trabajo. Mucho más en el caso de los pequeños y medianos productores, los más numerosos entre los castigados por estos incendios y que no suelen reunir las fuertes exigencias bancarias para acceder a líneas de crédito para enfrentar estas situaciones.
Independientemente de otras medidas que puedan adoptarse, el Partido Demócrata Cristiano les propone a las – los legisladoras-es provinciales:
a) Que en esta semana se sesione con la principal finalidad de atender esta problemática.
b) Que se apruebe la compra por parte del Gobierno, de las cabezas de ganado (cualquiera sea) necesarias para reponer las pérdidas de todos los pequeños y medianos productores.
c) Que se efectúe un urgente censo de estas pérdidas, las que por otra son fáciles de verificar con la tecnología informática que el Gobierno posee.
d) Que estas medidas se aprueben con la misma urgencia con que han sido aprobadas otras en casos notoriamente menos urgentes y con menor impacto en nuestra vida provincial.
e) Que para la coordinación y ejecución de estas medidas se cree un ente ágil y eficaz que tenga disponibilidad horaria completa para esta tarea.
Es ésta una ocasión para que actuemos todos con la toda la eficacia que requiere el amor al prójimo.
SAN LUIS. Agosto 18 de 2009.