LA NOTICIA

En el día de ayer se lanzó en  San Luis la “Corriente Nacional de la Militancia” nueva vertiente del kirchnerismo nacional. Eso ocurrió en el Salón de la Dirección Nacional de Vialidad, cita en Ava. Illia y Falucho.

El acto fue encabezado por el Ministro de Defensa, Agustín Rossi y el Secretario de Asuntos Relativos a las Malvinas, Daniel Filmus.

EL COMENTARIO

Es costumbre de larga data muy propia de las organizaciones herederas o sucesoras del peronismo el considerar al estado como cuestión propia de ellos cuando han ganado una elección. No en vano la Sra. Presidente supo incitar con aquello de “Vamos por Todo”, algo impropio de una democracia, pero propio, insisto, de esta línea partidaria de nuestra  Argentina.

LAS RAZONES.

¿Por qué digo esto?

Por el acto se concretó en un edificio del Estado Argentino y se sostiene con los impuestos de todos los ciudadanos. No es un edificio del Gobierno (qué solo debe administrarlo y cuidarlo), ni mucho menos es propiedad del Frente para la Victoria. Un acto político partidario debe realizarse en un lugares privados y no usar lo que deben administrar para ahorrarse un gasto de alquiler.

Por otra parte,  tanto Rossi como Filmus debieron estar trabajando en sus funciones ya que el acto se hizo en día hábil, ¿habrán justificado su inasistencia como deben hacer sus empleados? ¿O les descontarán el día como hacen las provincias con los docentes en huelga?

Sería muy bueno que ambos, Rossi y Filmus,  muestren cómo se pagaron sus pasajes y estadías.  ¿Lo hicieron de su propio bolsillo o con fondos estatales?

¿QUÉ PASARÁ?

Los funcionarios, todos los funcionarios, están en una vidriera, mucho más con la multiplicidad de medios de comunicación social. Y desde esa vidriera deben dar ejemplo, de capacidad, honestidad, dedicación.

Claro está que no cabe esperar demasiado en esa materia de quienes integran la fuerza gobernante en lo nacional. Al menos no de la mayoría de ellos. Abrigo la esperanza que haya alguno que sea transparentemente honesto.

Lo que no debemos hacer el resto de los argentinos es caer en aquello de:

• Todos lo hacen
• Todos roban
• Siempre fue igual
• Nada cambiará

y  otras formas de expresar la resignación ante estos hechos.

Quizás parezca poca cosa, pero muchas pocas cosas terminan construyendo algo grande.  Y quien no respeta lo poco, menos habrá de respetar lo mucho.

Lo que nunca debemos permitirnos es acostumbrarnos, rendirnos, callarnos ante todas y cada una de estas expresiones de corruptela política.

Recordemos pues cuando llegue el momento,  que éstas y otras candidaturas futuras se van gestando desde el uso a su favor de bienes y fondos del Estado por parte de muchos funcionarios que abandonan sus tareas de gobierno para sus actos partidarios.

NO CALLARNOS, NO RENDIRNOS, NO RESIGNARNOS.

SAN LUIS. Marzo 12 de 2012