Por aquello de que a falta de pan buenas son las tortas, tanto los asalariados (especialmente los  estatales) como sus gremios  vienen aceptando desde hace años el aumento de sueldo mediante sumas no remunerativas. Lo que configura un  pago en negro, ya que esos aumentos no se consideran para  ningún tipo de aportes. Por lo cual, si bien  en el corto lapso suman unos pesos; a la larga afectan a las obras sociales y también a los haberes jubilatorios, ya que no son tenidos en cuenta por ANSeS. Tampoco son tenidos en cuenta para el cálculo del aguinaldo ni del pago de vacaciones.Es decir, estos aumentos son pan para hoy y hambre para mañana. Y los estados nacional y provinciales van a la fácil y  persisten en esto de pagar en negro, sin preocuparse en ver las consecuencias, porque lo que se  paga en negro hoy,  hace un daño que lo arreglará otro en el futuro. Además de la flagrante contradicción de llamar como no remunerativa  a una parte de la remuneración.Lo último es lo vivido por nuestros docentes,  que se llevaron flor de chasco al cobrar sus aguinaldos, porque estos estuvieron muy lejos de lo esperado.

Ante los  reclamos individuales y  gremiales, la respuesta oficial la dio el responsable del Sub Programa Análisis y Liquidación de Haberes, Don. Alberto Sibert, quien dijo citando el Decreto 1078/84, que en el cálculo del aguinaldo deben excluirse  todos los conceptos que no tienen naturaleza remuneratoria o salarial. Como por ejemplo,  buena parte de los aumentos recibidos por los docentes tras el prolongado paro de comienzos de año.

Don Sibert sale a decir lo que le mandan a decir o lo poco que sabe. Lo que no debiera ignorar y mucho menos su ministro y el mismo gobernador,  es que hay fallos por los que se ordenó el pago retroactivo de los aguinaldos mal liquidados por no calcularlos con la inclusión de adicionales no remunerativos y que por dichas sumas se hagan los aportes que correspondan a la ANSeS.  Son fallos de la Justicia Federal y de la justicia de la ciudad de Buenos Aires, casos Chinampa y  Elizari respectivamente, entre otros. Y la misma Corte Suprema, ya ha dado señales en contra de esta pésima práctica de dar aumentos salariales.

El Gobierno de San Luis debe conocer esto y desde ya parar la mano con estos aumentos engañosos a corto plazo y dañinos en el mediano y largo. Se impone dar un definitivo adiós  a estos mal llamados aumentos salariales. Porque estos antecedentes servirán para todos los juicios que se inicien por este tema. Debemos responsabilizar a los funcionarios por este daño que se hace a los asalariados de hoy y a los jubilados de mañana.

Y  los perjudicados tienen  el derecho y hasta la obligación de iniciar las acciones judiciales para recibir lo que les corresponde.

SAN LUIS. Julio 19 de 2010.